En el aumento de precios de este 2025 ha influido, especialmente, el café, una de las bebidas preferidas en los hogares españoles por las mañanas, cuyo valor se ha incrementado un 20,2%, frente al 4,3% de 2024. Además, el precio de la leche ha registrado un incremento de un 4,3%, aunque esto se ha visto compensado parcialmente por la caída del precio del azúcar de un 19,3%.
El panorama no mejora para quienes prefieren una infusión, un café o un chocolate caliente, ya que su precio ha subido más de un 16,7%, confirmando la tendencia alcista de los dos años anteriores, en los que su incremento se aproxima al 40%.
Asimismo, los productos de bollería y confitería, habituales en los desayunos de muchos hogares y cafeterías, han crecido moderadamente, algo menos de un 2%, mientras que el pan y cereales apenas han crecido un 0,3%.
El análisis realizado por el profesor de EAE Business School también pone de relieve la ralentización en el precio del aceite de oliva, un complemento ideal para las tostadas del desayuno. Así, Javier Rivas señala que el coste del aceite de oliva ha bajado algo más del 40%, mientras que el resto de aceites ha subido un 18%, lo que consolida esta variedad de desayuno como uno de los más populares en los distintos territorios.
A pesar del incremento en el precio de los alimentos que componen un desayuno, el cálculo de EAE Business School revela que, aunque el ritmo de aumento de la inflación de los alimentos se ha moderado desde hace unos años, los precios de los productos básicos siguen al alza. En septiembre de 2025, los alimentos subieron un 2,1% en promedio con respecto al mismo mes del año anterior, lo que sigue afectando el bolsillo de los consumidores españoles.
Por su parte, Javier Rivas, profesor de EAE Business School, comenta: “el desayuno siempre ha sido una comida con alimentos básicos y, por lo tanto, accesible para muchas familias y establecimientos de hostelería. Sin embargo, esta nueva edición del ‘Breakfast Index’ de EAE, el indicador que mide la inflación de los precios de los principales alimentos consumidos en el desayuno, como el cacao, el café, el trigo o la leche, entre otros, constata una importante alza de precios. En España, los aumentos detectados en alimentos como el café, el chocolate, y derivados reflejan una tendencia preocupante, que podría influir en un cambio de hábitos entre los ciudadanos, reduciendo la cantidad de algunos productos y/o saltándose esta comida matinal tan necesaria”.